
07 May Es el momento de renovar tu Plan de Igualdad ¿Cómo se hace?
Que el compromiso con la igualdad ha llegado a todos los ámbitos sociales es una realidad desde hace mucho tiempo. De facto, no es solo una necesidad sino también una obligación. Muchas empresas redactaron sus planes hace más o menos cuatro años y ahora saben que es el momento de renovar su Plan de Igualdad. ¿Cómo se hace esto?
En Grupo Noa’s, desde nuestra división de consultoría, Noa’s Talent Solutions diseñamos y redactamos planes de igualdad para empresas de todos los tamaños desde hace años y hemos detectado que, muchas compañías no saben cuándo deben revisar su plan, actualizarlo e incluso, pasado el tiempo reglamentario de cuatro años de vigencia, redactar un nuevo plan.
Por eso, en este artículo queremos recordarte cuales son los pasos a seguir para elaborar un Plan de Igualdad y cuáles las ventajas de tenerlo actualizado y en vigor.
Primero un poco de contexto. El Plan de Igualdad es una herramienta esencial para garantizar la igualdad de trato y oportunidades entre mujeres y hombres en el ámbito laboral. Su elaboración y aplicación están reguladas por la Ley Orgánica 3/2007 y desarrolladas por el Real Decreto 901/2020, de 13 de octubre que modificó también el anterior Real Decreto 713/2010.
¿Qué empresas están obligadas a tener un Plan de Igualdad?
Desde el 7 de marzo de 2022, todas las empresas en España con 50 o más personas trabajadoras están obligadas a disponer de un Plan de Igualdad, aunque para las de más de 150 trabajadores/as ya era obligatorio desde 2020. Además, también deben elaborarlo aquellas compañías que, independientemente de su tamaño, estuviesen obligadas por convenio colectivo o por resolución administrativa.
¿Cuáles son las fases para la elaboración del Plan de Igualdad?
El proceso de elaboración e implementación de un Plan de Igualdad consta de las siguientes fases:
1. Compromiso y constitución de la comisión negociadora.
La dirección de la empresa debe manifestar su compromiso con la igualdad y constituir una comisión negociadora paritaria entre la representación de la empresa y la de las personas trabajadoras.
2. Diagnóstico de situación de la compañía.
En esta fase, se realiza un análisis cuantitativo y cualitativo de la situación de la empresa en materia de igualdad, abarcando áreas como:
-
-
- Proceso de selección y contratación
- Clasificación profesional
- Formación y promoción profesional
- Condiciones laborales y retributivas
- Ejercicio corresponsable de los derechos de la vida personal, familiar y laboral
- Infrarrepresentación femenina
- Prevención del acoso sexual y por razón de sexo
-
3. Diseño, aprobación y registro del Plan.
Teniendo como base el diagnóstico previo, es el momento de diseñar las acciones para implementar el plan. En el documento se deben establecer los objetivos, las medidas concretas, indicadores de seguimiento y evaluación, calendario de aplicación y recursos necesarios para ponerlo en marcha con éxito.
Además, el Plan debe ser aprobado por la comisión negociadora y registrado en el REGCON (Registro de convenios y acuerdos colectivos de trabajo) para que, oficialmente, tenga efecto legal.
4. Implementación y seguimiento.
En esta fase, se ponen en marcha las medidas acordadas en el documento. Normalmente, los responsables del plan deben asegurarse su correcta aplicación y realizando un seguimiento periódico para evaluar su eficacia. Sobre todo porque, si se detectan desviaciones o resultados no esperados, debe realizarse una revisión que reenfoque el plan y sus objetivos.
El seguimiento y evaluación del Plan deben realizarse de forma periódica, incluyendo al menos una evaluación intermedia y otra final. Para realizar estos estudios, se deben utilizar indicadores cuantitativos y cualitativos definidos desde el inicio que permitan medir el grado de cumplimiento de los objetivos y el impacto de las medidas adoptadas.
5. Evaluación y revisión.
Como hemos señalado, periódicamente se debe evaluar el grado de cumplimiento de los objetivos y el impacto de las medidas implementadas en esa hoja de ruta que es el Plan de igualdad. De hecho, el plan debe revisarse cuando se detecten desviaciones significativas del itinerario de trabajo marcado, se produzcan cambios en la estructura de la empresa o al finalizar su periodo de vigencia que son 4 años.
Ojo porque, una vez superado el periodo de vigencia sin renovación, el Plan pierde su validez, y la empresa debe elaborar uno nuevo para cumplir con la normativa o podría incurrir en sanciones administrativas.
Tener el Plan de Igualdad en vigor es una ventaja
Contar con un Plan de Igualdad en la empresa no solo es una obligación legal sino también una oportunidad para mejorar el clima laboral, atraer y retener talento, y proyectar una imagen corporativa comprometida con la igualdad y la diversidad. Pero además, actualmente hay otras normativas relacionadas con la igualdad en las que tu empresa debe estar al día, como son el Protocolo de Acoso y la nueva normativa de igualdad en el ámbito de LGTBI.
Si necesitas asesoramiento para la elaboración o implementación de un Plan de Igualdad en tu empresa o el Protocolo de Acoso y, por supuesto, de formación especializada en estos ámbitos no dudes en contactar con nuestro equipo de expertos. Podemos ayudarte ofreciéndote formación en igualdad totalmente bonificada. Llámanos y te asesoraremos.