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El salario emocional: qué es y cuáles son sus efectos en las organizaciones

Hablamos acerca de la importancia del salario emocional para la estabilidad y la imagen de las empresas como compañías empleadoras.

¿Por qué las personas abandonan empleos, a pesar incluso, de recibir una contraprestación económica justa? ¿Trabajamos sólo por dinero?

Tras el fenómeno de la gran renuncia, preguntas cómo estas son materia de reflexión y estímulo para mejorar en nuestras empresas.

Durante el día a día en la empresa, experimentamos vivencias y situaciones que nos pueden afectar positiva o negativamente en el plano emocional.

Si bien la situación en España no es la misma que en EEUU, como personas, como empleados/as, sí compartimos las mismas sensaciones, los mismos sentimientos y sí, también las mismas ganas de renunciar en más de una ocasión.

De hecho, todos los estudios consultados apuntan al incremento de la intención de cambiar de empleo entre las personas activas.

Por muchas razones el salario emocional tiene cada vez más peso e importancia y las empresas no pueden ignorar esto.

Entre ellas, podemos mencionar los cambios en la mentalidad y en los valores que van impregnando el pensamiento en la sociedad de forma transversal en todas las generaciones.

Hablamos de la revalorización del ocio, de la resistencia ante los sistemas tayloristas de producción, de las decepciones consecuencia de las sucesivas crisis que llevan a desear estar bien aquí y ahora, sin esperar a las recompensas de la etapa de la jubilación, de la desmitificación de ideas como el triunfo profesional o ser súper-personas.

Los empleados/as aspiran, no solo a ganar más dinero, sino también a tener mejores condiciones para conciliar su vida laboral y personal. Echan de menos sentirse motivados y agradecerían muy positivamente tener flexibilidad horaria o trabajar en proyectos en los que puedan aprender y crecer como profesionales. Quieren formación y, a ser posible, un plan de carrera, así como sentirse seguros/as en la empresa.

El salario emocional es la suma de todas las retribuciones de carácter no económico, que podemos percibir al realizar nuestro trabajo y que deben repercutir positivamente en forma de bienestar y estímulo motivador. Estas retribuciones, bien gestionadas nos llevan a crecer como profesionales y como personas y nos comprometen con la organización.

Por una parte, tenemos las que percibimos de forma subjetiva como recompensas: horario flexible, conciliación, autonomía en el trabajo, reconocimiento, satisfacción por el trabajo realizado o sentimiento de pertenencia, entre otras.

Por otro lado, encontraríamos las retribuciones que la empresa puede cuantificar y que para los empleados representan beneficios objetivos: guardería, aparcamiento, transporte, seguro médico, formación, planes de distracción dentro de la empresa, días libres o beneficios sociales, serían algunos ejemplos.

Las retribuciones del salario emocional que deseamos cambian a lo largo del tiempo, como cambiamos las personas y son diferentes según nuestro momento vital. Es importante ser asertivos para pedirlas, pero aún es más importante que sea la empresa quien tome las riendas y las proponga.

Los directivos/as de recursos humanos, como responsables de atraer, cuidar y fidelizar el talento en sus empresas, deben estar al corriente de cuáles son los factores más estimulantes para mantener un nivel óptimo de satisfacción, confianza y bienestar entre los empleados/as.

Establecer un salario emocional adecuado es una de las estrategias con mayor impacto

Los beneficios son muchos y alcanzan todos los niveles de la empresa. Algunos ejemplos son,

  • Empleados satisfechos, clientes bien atendidos y satisfechos, reducción de quejas
  • Reducción de defectos en el producto o en la prestación del servicio.
  • Mejora el clima organizacional.
  • Hay un mayor grado de compromiso con la organización
  • Descenso importante en la rotación de personal, en las bajas laborales…

Lo interesante es que estos beneficios son cuantificables, es decir, disponemos de indicadores que nos permiten medir las mejoras que se producen en la empresa y podemos ver perfectamente cómo aplicar estas políticas de retribución y de mejora del bienestar en las empresas afecta a sus cuentas de resultados.

El cambio es necesario y la tendencia imparable.

El objetivo de Noas Talent Solutions es acompañar a las organizaciones para desarrollar todo su potencial mostrándoles cómo aplicar políticas de salario emocional para mejorar el rendimiento.

Con la gestión del talento y el cuidado de la marca de nuestros clientes, siempre en el punto de mira, analizamos y evaluamos la situación en la empresa, definimos objetivos para la transformación e implementamos las estrategias y acciones necesarias para alcanzar un óptimo desarrollo organizacional.

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